San Martin de Porres (Santoral 3 de noviembre)

Diciembre 9, 1579 – noviember 3, 1639

San Martín de Porres nació en Lima, Perú, el 9 de diciembre de 1579. Martín era el hijo ilegítimo de un caballero español y un esclavo liberado de Panamá, de ascendencia africana o posiblemente nativa americana. A una edad temprana, el padre de Martin abandonó a su familia, dejando a Martin crecer en la pobreza extrema. A medida que Martin crecía, experimentó una gran cantidad de burlas por ser de raza mixta. Martin se convirtió en un hermano laico dominico en 1603 a la edad de 24 años. Martin fue elogiado por su cuidado incondicional de todas las personas, independientemente de su raza o riqueza. La vida de Martin reflejó su gran amor por Dios y todos los dones de Dios. Tenía muchas habilidades extraordinarias, incluyendo vuelos aéreos, bilocación, curaciones instantáneas, conocimiento milagroso, conocimiento espiritual y una excelente relación con los animales.

• ¿Es difícil amar a Dios con todo tu corazón, alma y mente? ¿Por qué o por qué no?
• ¿Quiénes son los prójimos en tu vida a los que se te manda amar?
• ¿Cómo pides perdón cuando no amas a Dios o a tu prójimo?
• Al celebrar el Día de Todos los Santos esta semana, considere los santos sobre los que hemos leído en lo que va del año. ¿En qué se parecen? ¿Qué historias de santos han sido más significativas para ti? ¿Por qué?

Calabazas talladas

Prepárate para Halloween tallando calabazas. Desafíe a sus hijos mayores a desarrollar diseños creativos para evangelizar a aquellos que vienen a pedir dulces a su casa a través de imágenes bíblicas o versículos de la Biblia. Anime a los más pequeños a involucrarse pintando calabazas pequeñas. Comparta la siguiente reflexión con sus hijos:

Ser cristiano es como ser una calabaza.
Dios te recoge del parche, te trae y te lava toda la suciedad.
Él te abre y saca todas las cosas asquerosas, incluyendo semillas de duda, odio, codicia, etc. Luego te talla una nueva cara sonriente y pone su luz dentro de ti para que todo el mundo la vea.

Olla de cocción lenta Pollo Cordon Blue

¡Muestra amor por tus vecinos haciendo esta receta y compartiendo algunas con ellos!

1 lata de crema condensada de sopa de pollo

1 taza de leche

8 muslos de pollo deshuesados y sin piel

8 rebanadas de jamón

8 rebanadas de queso suizo

Un paquete de 8 onzas de mezcla de relleno de hierbas

1/4 taza de mantequilla derretida

En un tazón pequeño, combine la sopa y la leche. Ponga suficiente mezcla en la olla de cocción lenta para cubrir el fondo. Despliega cada muslo de pollo y coloca un trozo de jamón y queso dentro. Doble el pollo hacia atrás y colóquelo doblado con el lado hacia abajo en una olla de cocción lenta. Vierta la sopa restante sobre la parte superior del pollo. Usando un rodillo, golpee la mezcla de hierbas hasta que se pulverice. Espolvorea el relleno por encima y rocía mantequilla sobre el relleno. Cubra y cocine a fuego lento de 4 a 5 horas. Puede quitar el inserto y colocarlo debajo de la parrilla para dorar la parte superior si lo desea.

Gratitud por la familia

Querido Jesús,
Gracias por el regalo de la familia. Ayúdanos a ser una familia sagrada como tu familia fue santa y es un modelo de santidad para nosotros. Ayúdanos a amarnos, entendernos y perdonarnos unos a otros, y a celebrar y regocijarnos en la bondad de los demás. Ayúdanos a ser una luz para los demás y buscar siempre amarte y servirte en los demás, especialmente en los ancianos y en los que pueden estar solos. Te lo pedimos a través de tu santo nombre. Amén.

El Evangelio de hoy habla del amor a Dios y del amor al prójimo. ¿Cuántas veces escuchaste la palabra "amor" en la Misa de hoy?

Esta semana, la Iglesia celebra las fiestas de Todos los Santos (1 de noviembre) y Todas las Almas (2 de noviembre). Analicen la Comunión de los Santos (CIC 962) y compartan historias de algunas de las cualidades santas de los miembros de su familia fallecidos. Muestre algunas imágenes en un lugar especial para recordar orar por las almas de los fieles difuntos en su familia.

El Día de Todos los Santos fue fundado a principios de la Edad Media por el Papa Gregorio III y es una forma de honrar y recordar a todos los Santos Santos juntos en un día. El Día de los Difuntos es un día para conmemorar y orar por las almas que han muerto y están en el purgatorio. Hasta el siglo 10, el Día de Todas las Almas se observaba durante la Pascua; se trasladó al 2 de noviembre en el siglo 11.